Madrid es una ciudad vibrante con una oferta gastronómica inigualable. Entre los lugares más icónicos para disfrutar de la cocina tradicional española destacan los restaurantes del Museo del Jamón, conocidos por su jamón ibérico de primera calidad, sus embutidos y su ambiente acogedor.
Con varios establecimientos en puntos estratégicos del centro de Madrid, el Museo del Jamón es una parada obligatoria tanto para madrileños como para turistas que buscan comer bien, en un lugar con historia y sin gastar demasiado.
En este artículo te contamos todo lo que necesitas saber sobre nuestros restaurantes: dónde estamos, qué platos puedes probar y por qué somos una de las mejores opciones para disfrutar de la gastronomía española en la capital.
¿Dónde están los restaurantes del Museo del Jamón en Madrid?
Los restaurantes del Museo del Jamón están ubicados en zonas clave del centro de Madrid, lo que los convierte en una opción ideal para quienes visitan la ciudad o trabajan en la zona y quieren disfrutar de una comida tradicional. Algunas de nuestras ubicaciones más populares son:
Gran Vía – Perfecto para una pausa entre compras o antes de disfrutar del teatro.
Calle Mayor – Un lugar con historia donde degustar los mejores embutidos en pleno corazón de Madrid.
Plaza Mayor – Ideal para disfrutar de una tabla de ibéricos mientras contemplas uno de los rincones más emblemáticos de la ciudad.
Carrera de San Jerónimo (junto a Sol) – A pocos pasos de la Puerta del Sol, un punto de encuentro perfecto para tomar un bocadillo de jamón.
Paseo del Prado (Atocha) – La mejor opción para quienes llegan o parten en tren y quieren saborear un buen plato de jamón antes o después del viaje.
Nuestras ubicaciones permiten que cualquier persona, ya sea turista o residente, pueda disfrutar de la auténtica cocina madrileña sin salir del centro de la ciudad.
Un restaurante con historia y tradición en Madrid
Desde su fundación, el Museo del Jamón se ha convertido en un referente de la gastronomía madrileña. Su concepto es claro: ofrecer productos ibéricos de calidad, raciones generosas y precios asequibles en un ambiente que recuerda a las clásicas tabernas españolas.
Los clientes que visitan nuestros restaurantes no solo disfrutan de la comida, sino que también viven una experiencia auténtica. Las paredes decoradas con jamones colgados, la barra siempre animada y el trato cercano de nuestro personal hacen que cada visita sea especial.
Ambiente único y tradición gastronómica
Al entrar en cualquiera de los restaurantes del Museo del Jamón, lo primero que llama la atención es la gran cantidad de jamones colgados del techo, un sello distintivo de la casa. Además, el ambiente de barra es perfecto para tapear con una caña bien tirada y una ración de embutidos.
Si prefieres una comida más tranquila, nuestras zonas de comedor ofrecen un espacio cómodo para disfrutar de una extensa carta, con platos caseros y opciones de menú del día que siguen las recetas tradicionales de la cocina española.
¿Qué se puede comer en el Museo del Jamón?
Nuestra carta ofrece una gran variedad de platos típicos de la gastronomía española, siempre con ingredientes de primera calidad. Tanto si buscas un bocadillo rápido como si prefieres sentarte a disfrutar de un menú completo, en el Museo del Jamón encontrarás opciones para todos los gustos.
Jamón ibérico y embutidos de primera calidad
El gran protagonista de nuestros restaurantes es, sin duda, el jamón ibérico. Ofrecemos una selección de jamones y embutidos de diferentes denominaciones, perfectos para degustar solos o acompañados de pan y un buen vino.

Algunos de los productos más destacados son:
Jamón ibérico de bellota- Con un sabor intenso y textura suave.
Lomo ibérico- Ideal para quienes buscan una alternativa al jamón con un toque más especiado.
Chorizo y salchichón ibérico- Perfectos para disfrutar en una tabla de embutidos o en un bocadillo.
Bocadillos y raciones para todos los gustos
En el Museo del Jamón, nuestros bocadillos son una de las opciones más populares, ideales para una comida rápida pero llena de sabor. Entre los más solicitados están:
- Bocadillo de jamón ibérico de bellota: Un clásico imprescindible.
- Tapas y raciones: Tortilla de patatas, croquetas, queso curado y más.
- Platos calientes: Callos a la madrileña, huevos rotos con jamón y carnes a la plancha.
Si prefieres compartir, nuestras raciones y tapas incluyen opciones como tortilla de patatas, croquetas caseras, queso curado y ensaladilla rusa, entre otros.
Disfruta del mejor tapeo en Madrid
Si algo nos diferencia es nuestra esencia de taberna madrileña, donde el tapeo es una de las mejores formas de disfrutar de nuestros productos. Nuestra oferta de tapas y raciones permite degustar lo mejor de la gastronomía española en un ambiente animado y acogedor.
Tapas y raciones para compartir
En barra o en mesa, el Museo del Jamón es el lugar ideal para compartir una tabla de ibéricos, un buen queso curado o unas croquetas caseras acompañadas de un vino o una cerveza bien fría.
Algunas de nuestras tapas más populares son:
- Tabla de jamón ibérico y embutidos: Ideal para compartir.
- Queso curado con membrillo: Un maridaje perfecto.
- Tortilla de patatas: Con el punto justo de jugosidad.
- Huevos rotos con jamón: Un clásico que nunca falla.
- Callos a la madrileña: Para los amantes de la cocina tradicional.
Ven a descubrir por qué el Museo del Jamón es uno de los mejores lugares para tapear en Madrid. Te esperamos en cualquiera de nuestros restaurantes para disfrutar de una experiencia gastronómica única.
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